Le Streghe (1967)

Le Streghe

También conocida como: “The Witches”, “Las brujas”
Año de estreno: 1967
País: Italia
Directores: Luchino Visconti, Mauro Bolognini, Pier Paolo Pasolini, Franco Rossi, Vittorio De Sica
Arquetipo: Emancipador
Comentario:

Bajo la mirada de cinco distintos directores, Le Streghe presenta un conjunto de relatos breves en los que Silvana Mangano encarna distintos personajes que ofrecen un abanico de posibilidades de subjetivación para las mujeres. En el primero de ellos, “La strega bruciata viva” (“La bruja quemada viva”) Mangano interpreta a Gloria, una superestrella de cine con una belleza extraordinaria que levanta pasiones en los hombres y envidia en las mujeres, pero que no logra ser dueña de sí misma ni de su destino; En “Senso civico” (“Sentido cívico”), Mangano ejerce el rol de una mujer astuta que utiliza como pretexto el llevar al hospital a un herido en un accidente automovilístico (Alberto Sordi) sólo para sortear el tráfico de la congestionada Roma y así llegar a tiempo a su cita; el tercero de los relatos, en un tono humorístico y con una estética camp, “La Terra vista dalla Luna” (“La Tierra vista desde la Luna”), presenta a un viudo (Totò) y su hijo (Ninetto Davoli) en la búsqueda de una nueva esposa y madre, la cual resulta ser Assurdina (Mangano), una dulce muchacha sordomuda dispuesta a llenar con amor y cuidados los vacíos del hombre y su vástago;  en “La siciliana” Mangano actúa bajo el papel de Nunzia, una mujer despechada que utiliza sus nexos familiares con la mafia para cobrar venganza en contra del hombre que traicionó sus sentimientos; “Una sera come le altre” (“Una tarde como otra”), el quinto y último corte de la antología, se centra en Giovanna (Mangano), la esposa de un actor de westerns (Clint Eastwood), quien atrapada en medio de la rutina y una relación de pareja cada vez más fría, no tiene otra alternativa más que recurrir a sus fantasías bajo un tamiz cinematográfico como la única válvula de escape.

Ciertamente, salvo en las animaciones de los créditos iniciales, en ningún momento de los episodios fílmicos mostrados en Le Streghe aparece una bruja de manera literal, sin embargo, las distintas mujeres encarnadas por Silvana Mangano llegan a compartir ciertas características propias del arquetipo de la bruja, ya que se trata de mujeres cuyas circunstancias las han colocado en situaciones de opresión — generalmente, bajo el yugo masculino—, pero gracias al uso de sus distintos dones “sobrenatuales” (sea a través de su belleza, su astucia, su bondad, su vínculos familiares o su imaginación) logran superar, o al menos sobrellevar, sus contrariedades.