Las brujas de Zugarramurdi

Año de estreno: 2013
País: España
Director: Álex de la Iglesia
Arquetipo: Terrorífico

Comentario:

Con un talante cómico, Las brujas de Zugarramurdi parte de la premisa de que las brujas vascas del siglo XVII han continuado con su legado hasta nuestros días, haciendo uso de sus prácticas y aquelarres para “empoderar” a las mujeres con el objeto de hacer colapsar a la civilización moderna y de paso, derrocar al patriarcado impuesto y sostenido por los hombres.

Aunque en primera instancia pudiera parecer que Las brujas de Zugarramurdi se trata de una cinta que, desde lo cinematográfico, se suma y se posiciona desde la resistencia feminista recurriendo al arquetipo de las brujas; en realidad, no es así. En primer lugar, los protagonistas de la película, José (Hugo Silva), Tony (Mario Casas) y Manuel (Jaime Ordóñez), son hombres que, de una u otra manera, han sido violentos con las mujeres que los rodean y a pesar de ello, han salido librados de recibir su merecido escarmiento gracias a los privilegios de los que gozan por el simple hecho de ser hombres. En segundo lugar, el desarrollo narrativo de los protagonistas los transforma de ser victimarios de las mujeres a víctimas perseguidas por brujas enloquecidas. Finalmente, ciertos personajes femeninos, como Eva (Carolina Bang) o Silvia (Macarena Gómez), nunca logran liberarse de una dependencia emocional hacia los hombres. Paradójicamente, Las brujas de Zugarramurdi, en su intento de contener cierto mensaje feminista, termina desplegando exactamente todo lo contrario, con un argumento que conforme avanzan los minutos pasa de la originalidad a lo ramplón.